El Platinazo

Así es como calificaron nuestros amigos cafeteros lo que estaba ocurriendo con Alexander Salazar y lo que probablemente ha sucedido con otros jugadores poco acostumbrados a este tipo de mesas, con sus peculiares recorridos y trayectorias.

Pero esto es el billar, y lo que hemos presenciado en la mañana, donde ha habido resultados para todos los gustos. Cierto es que Alex ha sufrido de lo lindo para adaptarse al material. Es verdad que los jugadores turcos juegan casi de memoria; Qué grandes jugadores como Rubén Legazpi han necesitado 44 entradas para derrotar a su rival y Peter Ceulemans otras 41.

Pero no es menos cierto que a otros les ha ido mejor. Forthomme, por ejemplo, terminó en 23 con una serie de 11. Palazón derrotó a Ozden, un turco en 19 entradas. Rudolph en 21. También los coreanos pusieron buenos números: Heo Jung Han (1,739) y Kim Jae Guen (2,105). Todo ello sin contar con los jugadores locales

La enigma podría descifrarse con una teoría más simple. A los turcos les sucede algo parecido que a los coreanos cuando una Copa del Mundo se disputa en el país asiático. Esto es, son muchos y buenos los jugadores que descubrimos y que en otros torneos no suelen acudir.

En cualquier caso, tanto Alex Salazar como los dos españoles tienen sus opciones para estar en la fase final que da comienzo mañana. El colombiano tiene que cumplir  esta tarde dos requisitos. Primero recuperarse del Platinazo, después vencer y con gran promedio, Aun así dependería de otro partido sin que él fuese protagonista.

Rubén y Javi solo tienen que ganar, aunque sumar una victoria en una Copa del Mundo son palabras mayores. No se muevan, después se lo contaremos.