Tres Bandas
VIERSEN - El equipo estrella turco con Murat Naci Coklu y Lütfi Cenet ha ganado el título mundial de tres bandas por equipos nacionales. En la sala del Festhalle, frente a 250 espectadores, la victoria fue para uno de los mejores países de billar en el mundo, en el partido final contra Holanda. Los turcos dominaron desde el principio y ganaron 40-22 en 17. Los dos integrantes del nuevo equipo campeón se sintieron abrumados por las emociones durante la ceremonia en el podio. ''Es un gran honor jugar para nuestro país y para nuestra bandera. Seremos recibidos como campeones en Turquía''.
Los cuatro equipos nacionales en el podio, Turquía, Holanda, Bélgica y Corea del Sur, son los países que lideran el ranking de los últimos cinco años en este campeonato. En semifinales, el equipo turco derrotó a Corea del Sur en una pelea emocionante. Los holandeses derrotaron a los belgas en el fascinante choque entre los dos países. El título mundial fue para Turquía por quinta vez en la historia. Murat Naci Coklu y Lütfi Cenet formaron pareja por primera vez.
La final fue un partido de una sola dirección, controlado por los turcos desde las primeras entradas. Los ganadores tomaron una gran ventaja con series de 6, 5 y 8 y finalmente en la última parte con otra serie de 6. Murat Naci Coklu: "Acabamos de llegar de la gran batalla con Corea en un partido que pudo pasar cualquier cosa''. Lütfi Cenet: "El juego con Holanda perdió esa tensión porque nos escapamos muy lejos y pudimos terminarlo sin presión''. Dick Jaspers: '' Tuvimos que pelear duramente todo el torneo, desafortunadamente, ya no funcionó en la final''. Raymond Burgman: "De todos modos, todavía podemos mirar hacia atrás y estar orgullosos de la plata en este mundial''.
El partido en la primera semifinal, un clásico entre los Países Bajos y Bélgica, se convirtió en un escenario de ensueño para los holandeses. Dick Jaspers y Raimond Burgman realizaron un pequeño milagro en el Derbi. Los holandeses llegaron a la final al ganar 40-37 en 26 luego de remontar un 17-0 en ocho entradas. La lucha por la supervivencia después del descanso dio al partido un ganador inesperado.
Dick Jaspers comentó más tarde el inicio del partido: "Teníamos que estar en la mesa a las diez, no es la hora habitual para jugar al billar". Tuvimos un comienzo frío con posiciones difíciles y los belgas jugaron muy fuerte en la primera parte''. Raimond Burgman: "Entonces miras el marcador y estamos 17-0 atrás. Esa es una misión difícil, pero sabemos que hemos sido un equipo fuerte durante 30 años cuando tenemos que jugar juntos. Y ambos somos grandes luchadores''.
Los holandeses, después de 17-0, rebajaron por primera vez la diferencia a 20-12, se acercaron hasta 23-20 y tomaron la delantera por primera vez con una serie de 12: 36-33. El partido entró en una final emocionante con 37-37. Los Países Bajos mostraron nervios de acero en las últimas entradas. El equipo Orange terminó 40-37 y llegó a la final nuevamente después de tres victorias en este campeonato mundial: dos veces con Jaspers y Burgman, una vez con Jaspers y Jean van Erp.
Los turcos ganaron el thriller en la otra semifinal contra Corea del Sur con un final de nerviosismo. El partido subió y bajó hasta la etapa final: Turquía lideró 13-10 después de una serie de 7, los coreanos ideraron 28-20 después de diez entradas. El emocionante final del partido comenzó en 38-38, continuó en 39-39. Luego, los turcos hicieron el último punto: 40-39. Jae-Ho Cho fue a la salida para igualar, pero jugó 'muy corto' y falló.
Los coreanos cayeron bajo la presión, al estar tan cerca de una nueva racha de títulos. En los últimos dos campeonatos del mundo la medalla de oro fue para la potencia asiática: primero en 2017 con Sung-Won Choi y Jae-Guen Kim y el año pasado con Sung-Won Choi y Dong-Koong Kang.
El campeonato mundial por naciones, por última vez con el sistema Scotch Double, tuvo algunos puntos destacados: entre otros, el partido entre Colombia y Turquía en las rondas previas (40-38 en 16) con triunfo cafetero ante quienes más tarde han logrado el Oro. Más tarde el Holanda-Bélgica y el emocionante final en el partido entre Turquía y Corea (40-39). La sala en el Festhalle se llenó moderadamente los primeros días y extrañó a los fanáticos de los alemanes. El equipo de casa no pudo llegar a las eliminatorias. El último día, la sala se llenó con alrededor de 250 espectadores.
